Alojamientos
Se busca que el beneficio que es una gran herramienta para el sector sea ley. El texto se encuentra en elaboración, será discutido en el mes de marzo.
Luego de un año bastante complicado para el turismo como lo fue el 2020, encontró en el Pre Viaje una herramienta para salir nuevamente a flote. En su primera edición se facturaron 10 mil millones de pesos, con una variación positiva del 650%. En su segunda edición ya lleva facturados 75mil millones de pesos con el movimiento de más de 3 millones de turistas.
Es por eso que se buscará que este beneficio que en principio se buscaba como una ayuda, sea ley 'Queremos que sea una ley muy robusta, que deje a Previaje como una política de Estado, porque fue la política pública más importante de la historia en términos de turismo' enfatizó Matías Lammens, Minstro de Deportes y turismo de la nación.
Con este proyecto se buscará el impulso de inversiones turísticas: reducción en contribuciones patronales, devolución a través de un bono fiscal de las inversiones que se hagan, acceso al mercado único de cambios para las inversiones extranjeras en un porcentaje de lo que se invierta, etc.
El proyecto de ley buscará que en los próximos años Previaje se enfoque en el impulso de las temporadas bajas. Extender las temporadas en los destinos. No se va a hacer incentivo en las temporadas altas, que lo hicimos ahora por motivos relativos al daño provocado en el sector por la pandemia
Desde la Cámara Argentina de Turismo, también mostraron su alegría por la implementación del plan y porsupuesto, su adhesión a la idea de que sea ley: 'El movimiento que ha generado el programa es impresionante. Se superaron ampliamente todas las expectativas. No sólo potenció el movimiento del verano, sino que lo anticipó porque noviembre y diciembre ya fueron meses de mucho movimiento' manifestó Aldo Elías, Vicepresidente de la cámara.
Además agregó:'El movimiento que ha generado el programa es impresionante. Se superaron ampliamente todas las expectativas. No sólo potenció el movimiento del verano, sino que lo anticipó porque noviembre y diciembre ya fueron meses de mucho movimiento'.
Pero también realizó algo de autocrítica de cara al futuro:'Hay que pensar en un plan más direccionado. No tiene sentido promover el turismo interno en temporadas altas porque tampoco todos los lugares tienen la capacidad para recibir a tanta gente. Es más lógico apuntarle a la temporada baja'.Cerró.